Manuel Martín Pintado Ureña
Manuel Martín Pintado Ureña, aunque no había nacido en Mora, sino en Toledo, en 1925, estaba unido a nuestro pueblo por las raíces de su apellido, por su matrimonio con una moracha, María del Carmen Peñalver y por las muestras de su arte que siempre brindó a Mora con generosidad. Suyos fueron los primeros carteles artísticos de nuestra Fiesta del Olivo y los diseños de las primeras carrozas de las reinas de nuestro festejo olivarero en cuyo nacimiento participó. Pero su arte, además de generoso fue genial sobre todo en algunas especialidades, como el difícil universo de la acuarela y la sensible prueba de la plumilla, en las que alcanzó maestría raras veces superable. Tras su temprana muerte en 1982 una "exposición homenaje" ofreció junto a las acuarelas y las plumillas, ya más conocidas, un amplio repertorio de aguafuertes, dorados, óleos con escenas cinegéticas, bodegones, retratos... que suponían casi un descubrimiento total de este "peculiarísimo artista", sobresaliente en muchas cosas, del que dijo el poeta Juan Antonio Villacañas que "tenía el don de interpretar esa verdad humana que al final parece ser el juicio de todos".
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